Semana Negra con Carmen Posadas

El club de lectura "Café Candás" rompe barreras y cruza el telón de acero, nos fuimos a la Semana Negra.
En la entrada nos recibe un vikingo gigante "con bigote" que responde por el nombre de TOR y que nos servirá de guía por si nos perdemos en el laberinto de libros, atracciones, fritanga, ropa y complementos varios. No tenemos por qué preocuparnos estamos en nuestra casa.
Tras momentos de máxima tensión, debido a la bajada de azúcar de una compañera, recuperamos toda la paz cuando la pudimos estabilizar con un inmenso donuts de chocolate. La próxima misión imposible era encontrar alojo para nueve personas en una terraza en la que poder tomar unos refrigerios.
El lugar tenía que ser estratégico para poder captar todo lo que se cuece en la Semana Negra y no me refiero al pulpo. La aparición de diferentes especímenes no se hizo esperar. Quizás atraídos por el inquietante castañeo de dientes de una cabeza de cabra cubierta de espumillón de navidad y que fue grabada por la Televisión Española. Como bien dijo una compañera, "Si una cabra con espumillón es lo más interesante de la Semana Negra, ya no sé en qué creer".
Una vez hecho el recorrido de rigor por todos los stands literarios nos dirigimos a la carpa de encuentros donde tuvimos el placer de conocer a Carmen Posadas y Paco Ignacio Taibo II. Decir que Carmen Posadas nos pareció encantadora y muy cercana. En la presentación de su último libro "Invitación a un asesinato" junto con Fernando Marías, nos encandiló de tal manera que hicimos cola con libro en mano y que muy amablemente nos dedicó.
Una vez que alimentamos nuestra mente como era de esperar en el paraíso del libro y del churro teníamos que alimentar nuestros estómagos. Descartamos el codiciado pulpo de Casa Mario porque la cola llegaba hasta el aparcamiento "oficial" de la Semana Negra, el Molinón. Así que a empezamos a buscar desesperadamente un sitio para cenar. El hombre del grupo corrió como alma que lleva el diablo abriéndose camino a empujones entre la manada y por fin encontramos sitio.
Mientras comíamos las costillas y las croquetas los camareros nos amenizaban con gritos ensordecedores y diversas amenazas que en algún momento temíamos que acabaran en reyerta. Pero es de esperar, es la Semana Negra.
Una vez lleno el buche decidimos ir al centro de Gijón para charlar en una cafetería en un ambiente más "tranquilo".
Cuando ibamos hacia el aparcamiento vivimos un momento de máxima tensión. Un coche circulaba sigilosamente por la carretera detrás de nosotros cuando una voz de mujer nos pregunta: ¿Tenéis el coche cerca de aquí? de repente un NO¡ seco y brusco, cerró cualquier posible conversación. El doctor House entra en escena.
Y llega el momento "DINDURRA DELUXE", la tertulia literaria derivó en otros temas de conversación mucho más mundanos. Que evidentemente no puedo publicar porque me meterían presa. Solo puedo comentar que se desmontaron muchas leyendas urbanas, entre ellas la del Baileys con coca cola que acartona. Pero también empezaron a circular los motes. ¿Qué sería Candás sin los motes? nuestro símbolo de identidad.
Ahí van algunos para que nos vayamos conociendo: La antitaurina (Lorena) anteriormente conocida como la cuasi o pseudoecologista, José Tomás o José Tomaso, artista anteriormente conocido como House, y finalmente Maica la Breve, ¿Cuánto durará en Polonia? ¿Se cansará de comer salchichas de plástico polacas y volverá pronto Asturias a comer chorizos a la sidra?.
To be continued...